abcdesevilla.es, 01/08/08
Un vigilante de seguridad, que trabajaba en la entrada del vestuario infantil de un club social de Sevilla, ha sido denunciado por realizar presuntos abusos sexuales a una niña de 8 años que acudió a pedirle un juego de mesa.
Un vigilante de seguridad, que trabajaba en la entrada del vestuario infantil de un club social de Sevilla, ha sido denunciado por realizar presuntos abusos sexuales a una niña de 8 años que acudió a pedirle un juego de mesa.
El abogado que ha presentado la denuncia, Carlos Galán, ha explicado hoy que los hechos ocurrieron en el Club Labradores a mediodía del pasado 30 de junio, cuando el vigilante presuntamente hizo tocamientos libidinosos a la niña por distintas partes del cuerpo y por encima del bañador.
El denunciado es un vigilante de seguridad que realizaba su trabajo a la entrada del vestuario infantil de la piscina, donde además estaba encargado de facilitar a los niños los juegos de mesa que le pedían.
Según la denuncia, cuando la niña le pidió un parchís, el acusado le dijo que entrara ella misma para elegirlo. La menor "se quedó paralizada con lo ocurrido y fue rápidamente a contárselo a su madre", ha explicado Galán.
El denunciado, en su declaración como imputado ante el juez de instrucción 5 de Sevilla, ha negado el delito y ha explicado que cuando se levantó para dejar pasar a la niña, se tropezó y se agarró a su cintura. A continuación "le dio un beso para que no se asustase", según el denunciado.
Galán ha indicado a Efe que el denunciado ha sido apartado de su puesto de trabajo por la empresa Omega, para la que trabajaba, y ha lamentado que dicha compañía no comprobase previamente los antecedentes penales del vigilante, que acumula tres sentencias firmes por delitos de exhibicionismo y provocación sexual.
El detenido M.A.R. quedó en libertad con cargos y con obligación de presentarse cada 15 días en el juzgado, mientras que Carlos Galán ha pedido al juez que tome declaración como testigo al gerente del Club Labradores para que acredite las funciones que tenía asignadas el denunciado, que llevaba un mes en el puesto, y que se incorporen esas tres sentencias penales contra él.
Se da la circunstancia de que este es el segundo caso de abusos sexuales denunciado en dicho club, pues en el año 2000 un monitor de ajedrez de 48 años fue condenado a 23 meses de multa por un delito continuado de abusos sexuales cometido contra dos niñas de 8 y 12 años, a las que hizo tocamientos obscenos.
